Costes de mantener una vivienda vacía

España es el país de la Unión Europea con mayor número de viviendas vacías. En total, según datos publicados en 2011 por el Instituto Nacional de Estadística, que realiza esta estadística cada diez años, en nuestro país hay 3,4 millones de viviendas vacías, que, sin embargo, tienen un coste, a veces bastante elevado, para sus propietarios.

Es cierto que muchas de esas viviendas están en venta y permanecen vacías mientras encuentran un comprador, pero son muchos los casos en los que los propietarios no quieren o no pueden ponerlas a la venta y optan porque permanezcan vacías.

Las causas de que un propietario tome una decisión son varias: razones sentimentales, temor ante posibles destrozos o impagos si se alquila, que se considere que la rentabilidad del alquiler es escasa, teniendo en cuenta posibles molestias que puede ocasionar etc.  El caso es que se trata de una decisión que no es precisamente barata, ya implica asumir unos gastos que, de media superan los 2.000 euros anuales. Una cantidad que se puede incrementar fácilmente en función del lugar donde se encuentre o su tamaño, entre otros factores.

Y es que el hecho de que una vivienda no esté habitada no exime de pagar determinados impuestos, la cuota de la comunidad de vecinos, gastos mínimos por tener dados de alta los suministros, en el caso de que se decida mantenerlos, o el  pago anual de un seguro con coberturas mínimas, si deseamos estar protegidos ante posibles siniestros.  

A continuación damos más detalles sobre cada uno de estos gastos, y hacemos un cálculo aproximado sobre los que pueden suponer.

Impuestos

El Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) tiene carácter municipal y graba la posesión de cualquier bien inmueble (viviendas, locales comerciales, garajes y trasteros), sin importar si éste está en uso o no.

Por lo tanto, cualquier propietario tiene la obligación de abonar el impuesto que se calcula en  función del valor catastral del inmueble, al que se le aplica un coeficiente que, por ley, se sitúa ente un 0,4% y  el 1,1% en el caso de los inmuebles urbanos, y entre el 0,3 y el 0,9% en el caso de los rústicos.

El coste medio del IBI está entre los 350 y los 500 euros en el caso de las viviendas. Además, habría que añadir el de garaje y trastero, en el caso de que los hubiera, que puede ser de unos 60€ en el caso de los garajes, y de unos 10€ para los trasteros.

Además, en determinados municipios también hay que pagar la tasa de basura, que se abona independientemente de que se esté utilizando la vivienda

Gastos de comunidad

Todo propietario está obligado a satisfacer las cuotas de la comunidad de propietarios. La cantidad a pagar mensualmente de una comunidad a otra varían muchísimo en función de los gastos que generen los servicios comunes del inmueble y las tareas de mantenimiento.  

En general, como mínimo podemos calcular un gasto de 300€ anuales (25€ al mes) en el caso de un inmueble sin ascensor  ni ningún otro servicio adicional y en buen estado (sin derramas para sufragar gastos extraordinarios de mantenimiento). A partir de ahí, las cuotas de la comunidad van ascendiendo en función de los servicios de los que disponga el inmueble (ascensor, portero físico, jardines y/o piscina comunitaria, calefacción central etc) o de si es necesario realizar alguna obra de mantenimiento que implique una derrama en la cuota de la comunidad, que estará obligado a pagar, una vez lo haya aprobado la Junta de propietarios.

Así que lo normal en la mayoría de las comunidades de propietarios es que la cuota oscile entre los 50 y los 100€, aunque como hemos visto, las hay en las que está muy por debajo, y otras en las que se pueden superar sin problemas los 150€ mensuales.

Seguro del hogar

Aunque no se trata de un gasto obligatorio, desde luego es más que recomendable, aunque la vivienda no esté en uso, tener suscrito un seguro del hogar con  una cobertura mínima que proteja ante cualquier tipo de siniestro o suceso inesperado, lo que supone una cuota mínima que puede oscilar entre los 120 y los 150 euros.

Suministros

Lo normal es que los propietarios de viviendas vacías decidan mantener dados de alta los suministros, por lo menos la luz y el agua (nunca sabemos en qué momento será necesario entrar en el piso o realizar una limpieza), lo que supone un coste mínimo mensual de unos 15-20 euros en el caso de la luz,  en función de la potencia contratada,  y de unos 10€ en el caso del agua, salvo que vaya incluida en la cuota de la comunidad. Si además, también se mantiene el suministro de gas, habrá que añadir unos 15€ adicionales.

Mantenimiento

Las viviendas vacías también van poco a poco deteriorándose, un deterioro que incluso puede ser mayor que el que sufren las que están en uso cuando hablamos de determinadas instalaciones como la eléctrica o las tuberías.

Por eso, aunque no lo podemos contabilizar como un gasto anual, habrá que revisar el estado de la vivienda y sus instalaciones de manera periódica y de vez en cuando hacer frente a reparaciones o gastos de mantenimiento, que evidentemente contribuirán a incrementar la factura de los gastos que implica mantener el inmueble sin ocupar.

Antonia M Andreu

Síguenos en Google+